
Según cuenta Autocar, Carl-Peter Forster, jefe de Tata, ha declarado que Jaguar se encuentra en negociaciones con un fabricante chino para cerrar un acuerdo de producción de los modelos del felino británico en suelo asiático, garantizando de esta forma su entrada en el enorme mercado de los coches de lujo en China.
Los coches allí producidos se quedaría sola y exclusivamente para el mercado local, mientras que el resto de países seguirían recibiendo Jaguar "made in Britain", como Dios manda. Este acuerdo ayudaría a incrementar las ventas de la marca inglesa, y a amortizar mejor los desarrollos de cada nuevo modelo.
